Una ballena puede hacer daño, pero no suele ser su intención. Las ballenas son animales pacíficos y curiosos, que a veces se acercan a los humanos para interactuar o investigar. Sin embargo, debido a su gran tamaño y fuerza, pueden causar accidentes o lesiones involuntarias si no se respetan las normas de seguridad y distancia.
Algunos ejemplos de daños que pueden causar las ballenas son:
- Golpear con la cola o la aleta a una persona o una embarcación, lo que puede provocar fracturas, contusiones o hundimientos.
- Saltar sobre una persona o una embarcación, lo que puede causar aplastamiento, asfixia o ahogamiento.
- Morder o tragar accidentalmente a una persona, lo que puede ocasionar heridas, infecciones o asfixia.
- Transmitir enfermedades o parásitos a una persona, lo que puede generar fiebre, alergias o infecciones.
Estos son algunos de los daños que pueden causar las ballenas, pero son muy raros y se pueden evitar con precaución y respeto.
¿Por qué les temen a las ballenas?
Es rato que todas las personas le teman a las ballenas, pero es entendible que algunas puedan sentir miedo o respeto por estos animales. Algunas posibles razones por las que algunas personas le temen a las ballenas son:
- El tamaño y la fuerza de las ballenas: Las ballenas son los animales más grandes del planeta, y pueden llegar a medir más de 30 metros y pesar más de 150 toneladas. Su tamaño y su fuerza pueden impresionar o intimidar a algunas personas, que pueden sentirse vulnerables o amenazadas ante estas criaturas. Además, las ballenas pueden causar daños involuntarios si golpean o saltan sobre una persona o una embarcación.
- La falta de conocimiento sobre las ballenas: Muchas personas desconocen las características, el comportamiento y la importancia de las ballenas, y se dejan llevar por mitos, leyendas o prejuicios. Algunas personas pueden creer que las ballenas son agresivas, peligrosas o malvadas, cuando en realidad son pacíficas, curiosas y sensibles. Otras personas pueden ignorar el papel ecológico y económico que tienen las ballenas para el océano y el planeta.
- El impacto de los medios de comunicación y la cultura popular: Algunos medios de comunicación y algunas obras de ficción pueden presentar a las ballenas como monstruos, enemigos o amenazas para los humanos. Algunos ejemplos son la novela Moby-Dick, la película Tiburón o el videojuego Subnautica. Estas representaciones pueden influir en la percepción y la actitud de algunas personas hacia las ballenas, generando miedo o rechazo.
¿Cómo diferenciar el hallazgo de una ballena y un tiburón?
Para diferenciar el hallazgo de una ballena y un tiburón, se pueden observar algunas características físicas y de comportamiento que los distinguen. Algunas de estas características son:
- La forma del cuerpo: Las ballenas tienen un cuerpo alargado y estrecho, con una aleta dorsal pequeña o inexistente. Los tiburones tienen un cuerpo fusiforme y aerodinámico, con una aleta dorsal grande y triangular.
- La forma de la cola: Las ballenas tienen una cola horizontal, con dos lóbulos llamados flukes. Los tiburones tienen una cola vertical, con dos lóbulos desiguales llamados caudales.
- La forma de la boca: Las ballenas tienen una boca grande y arqueada, con barbas o dientes cónicos. Los tiburones tienen una boca pequeña y alargada, con dientes afilados y serrados.
- La forma de las branquias: Las ballenas no tienen branquias, sino que respiran por un orificio en la parte posterior de la cabeza llamado soplador. Los tiburones tienen branquias a los lados de la cabeza, por donde respiran el agua.
- El comportamiento: Las ballenas son animales sociales y curiosos, que a veces se acercan a los humanos para interactuar o investigar. Los tiburones son animales solitarios y cautelosos, que suelen evitar el contacto con los humanos.
Martín Prieto comenzó su carrera en Greenpeace Argentina como Director Ejecutivo. Logró importantes avances como la sanción de la Ley de Promoción de la Energía Eólica y la Ley de Protección del Bosque Nativo. En 2012, asumió como Director Ejecutivo de Greenpeace Andino, liderando las oficinas de Argentina, Chile y Colombia hasta 2018.
En 2006, Prieto fue designado Líder de la Campaña de Ballenas por Greenpeace International, destacándose en el bloqueo de los intentos de Japón de retomar la caza comercial de ballenas junto a la Comisión Ballenera Internacional. Además, ha sido asesor de Greenpeace International, Greenpeace Mediterráneo, Greenpeace India y Greenpeace Rusia.