Una gran amenaza
Las colisiones que se manifiestan entre mamíferos marinos y barcos, muy conocidas como “choques de barcos” ya se han identificado como una de las amenazas más importantes en las principales poblaciones de ballenas.
Independientemente de que se hayan tomado medidas preventivas y en general hayan sido exitosas, como son la aplicación de sistemas de observación y el cumplimiento de las reglamentaciones de desaceleración, todavía las principales navieras y cruceros siguen implementándolas.
Para motivar esta aceptación, Friend of the Sea llevó a cabo un estudio exhaustivo donde analizó el nivel de compromiso que tienen las principales líneas de cruceros y navieras. De esa manera identificaron qué entidad demuestra el mayor esfuerzo para mejorar las colisiones entre barcos.
Datos relevantes
A través de los sitios webs de las empresas y los informes de sustentabilidad se recopiló información disponible, además de artículos académicos. De esa manera, las empresas han sido clasificadas de acuerdo con el nivel de compromiso que tienen, el cumplimiento con áreas de desaceleración, las iniciativas para reducir la contaminación acústica, los programas de observación a bordo y los informes específicos de donde se han producido colisiones con barcos.
Un dato que no es menor, los puntajes se modifican cuando se ha informado evidencia de los choques con ballenas. Asombrosamente, 20 de los mayores operadores de líneas de cruceros -incluso el transporte marítimo a nivel mundial- se ha incluido en esta evaluación.
Esta lista sigue siendo un punto de referencia para que muchas otras empresas, independientemente de su tamaño y que deseen participar en el ranking, se sigan sumando.
Asimismo, y desafortunadamente, más allá de la considerable evidencia que concluye la significativa relación entre la velocidad de un crucero y los choques con barcos, pocas de las empresas que fueron evaluadas han aplicado los debidos controles de velocidad en las áreas de alto riesgo identificadas.
Vale aclarar que son áreas específicas donde las rutas de navegación congestionadas inevitablemente convergen con especies de ballenas en peligro de extinción. La mitad de todas las empresas que cotizan en bolsa expresan un cierto nivel de compromiso. Sin embargo, el resto aún no parece mostrar ningún tipo de preocupación en torno a la problemática.
El problema: es un fenómeno de masacre silenciosa
Hasta hace muy poco, en general se creía que las mayores amenazas para las poblaciones de mamíferos marinos eran la caza de ballenas como la captura accidental o incidental.
No obstante, ciertos estudios recientes identificaron que las colisiones entre diversos mamíferos marinos y barcos, más conocido como “choques de barcos” ahora se considera una de las principales amenazas.
Este fenómeno generalizado se lo llama la “masacre silenciosa”. Esto se debe a que las huelgas a menudo pasan desapercibidas. Por ello, no se documentan y lleva a que el problema – en gran medida – se descuide.
A través de estudios basados predominantemente en ballenas varadas se trata de estimar el número de impactos. Así es que se ha supuesto que la gravedad del problema se subestima y en gran medida termina el 10% de las ballenas fallecidas llegando a la costa.
Las consecuencias ambientales que provoca
Debido a que la industria naviera sigue creciendo exponencialmente, duplican su tamaño cada 10 años y sin duda esto extiende el impacto letal sobre las ballenas. Según expertos, estiman que los buques de carga, los cruceros y pesqueros, chocan y terminan matando al menos 20.000 ballenas cada año.
Estas colisiones mortales suceden tanto en el Mar Mediterráneo como en Sri Lanka. Se asegura que casi se han duplicado en los últimos 40 años y tristemente esto inflige en un golpe asombroso reduciendo a la mitad el tamaño de las poblaciones de ballenas.
Estadísticamente, son 7 de las 13 especies de ballenas grandes que ya están clasificadas como especies en peligro de extinción. Es una preocupación inmediata. Así es que los estudios han determinado que estas continuas colisiones de barcos conseguirán que muchas especies queden al borde de la extinción.
Posibles soluciones
Los esfuerzos de mejora inmediatos y colectivos están siendo críticos. La inacción está conduciendo a una posible extinción de las grandes poblaciones de ballenas. Por esta razón es que Friend of the Sea ha lanzado una campaña de concientización.
Así es que se está trabajando para atraer la atención vital sobre este tema que se encuentra tan descuidado y responsabilizar a las principales líneas navieras por el daño ambiental continuo.
Friend of the Sea es un programa que trabaja en promover productos y servicios que respeten y protejan el medio ambiente marino. Ya lanzó una campaña de concientización y se extendió un premio Whale-Safe 2022 a todas aquellas entidades navieras que han implementado con gran éxito las medidas para prevenir las colisiones con barcos.
¿Se puede ayudar a salvar a las ballenas?
Se puede apoyar a la campaña Save the Whales firmando la petición de Change.org. Esto ayudará al programa a convencer a todos los operadores de líneas de cruceros y navieras a que hagan finalmente un cambio en beneficio a la conservación de los mamíferos marinos.
Martín Prieto comenzó su carrera en Greenpeace Argentina como Director Ejecutivo. Logró importantes avances como la sanción de la Ley de Promoción de la Energía Eólica y la Ley de Protección del Bosque Nativo. En 2012, asumió como Director Ejecutivo de Greenpeace Andino, liderando las oficinas de Argentina, Chile y Colombia hasta 2018.
En 2006, Prieto fue designado Líder de la Campaña de Ballenas por Greenpeace International, destacándose en el bloqueo de los intentos de Japón de retomar la caza comercial de ballenas junto a la Comisión Ballenera Internacional. Además, ha sido asesor de Greenpeace International, Greenpeace Mediterráneo, Greenpeace India y Greenpeace Rusia.