Las belugas son una de las especies de cetáceos más sorprendentes de los mares. Poseen un cerebro con un ecologalidor similar a un GPS moderno y también pueden crear sonidos y melodías con los registros de intensidad más potentes del océano. 

El cerebro de las ballenas belugas ha fascinado al mundo científico por sus asombrosas características que han ubicado a estos cetáceos entre los más inteligentes de los mares . Entre algunas de las más relevantes,  es que estos animales marinos, cuentan en su cerebro con un GPS natural integrado que les permite emitir cientos de sonidos y cantos diferentes.

Este órgano en las belugas, está contenido en una estructura de carácter esponjoso conocida como ‘melón’, que les permite comunicarse con otras ballenas y ubicarse en su medio o hábitat marino.

A las belugas , los científicos les han puesto el nombre de ‘canarios del mar’. El motivo es que estos cetáceos son los que poseen más dotes expresivas que les permiten producir una amplia variedad de sonidos de diferentes intensidades . Lo más llamativo es que las belugas no poseen cuerdas vocales sino que esta amplia variedad de sonidos proviene de su cerebro y su increíble potencial.

Un sistema de comunicación asombroso

Los biólogos marinos explican que las belugas se comunican “por intermedio de los sacos nasales que están ubicados en los contornos de su espiráculo”. Justo enfrente de este orificio, que les sirve para respirar , las belugas poseen una estructura de característica esponjosa llamada ‘melón’. Ubicado en la punta delantera de la cabeza, esta significativa protuberancia recibe instrucciones directas del sistema nervioso y es vital para su supervivencia, siendo de alguna manera “el centro de operaciones y comunicación” de las belugas. 

El melón de las belugas, es una estructura esponjosa, suave y delicada. Aunque a primera vista parezca lo contrario, puede moldearse. De hecho, las mismas ballenas pueden moverlas según sean sus necesidades. Pero, lo más asombroso es que además de contener el cerebro de las belugas, el ‘melón’ es el encargado de guiar los sonidos que las ballenas emiten utilizando sus cavidades nasales.

Expertos de la organización Whale and Dolphin Conservation brindan algunos detalles de este particular órgano: «Las belugas son uno de los animales más inteligentes de los mares y océanos gracias a la conformación de su sistema nervioso que las ha dotado de funciones sobresalientes . Entre estas características se encuentra un sistema de GPS natural y una capacidad de comunicación con sonidos intensos y en un rango amplísimo gracias a un elemento clave llamado melón. Las ballenas pueden mover estos melones y enfocar los sonidos hacia direcciones puntuales. Además, estos órganos pueden cambiar su forma a voluntad de las belugas en el momento de las vocalizaciones, para otorgarles más intensidad y potencia a sus sonidos o cantos marinos” explican desde el portal de la institución. 

Un GPS natural 

Según explica la plataforma de investigación del Ártico Polar Guidebook, este órgano específico de las belugas «genera sonidos de baja y alta frecuencia que son esenciales a la hora comunicarse con sus pares, alimentarse y realizar largas travesías marinas. Un instrumento equipado para la multifunción , único y de diseño natural que hacen de las ballenas belugas uno de los animales más inteligentes de los océanos. 

El ‘melón’ que poseen las belugas si lo comparamos con la tecnología que poseemos los hombres sería equiparable a un GPS natural. Esto es así porque el cerebro de estas ballenas tan particulares está diseñado para ser un eficaz instrumento de ecoubicación. Así se denominan las llamadas resonantes que estos animales emiten para encontrar diferentes objetos y comunicarse entre sí. La región suave y protuberante que tienen en la frente proyecta y enfoca de modo estratégico estas señales sonoras que viajan debajo de las aguas. 

Estas ballenas, en caso de estar en cautiverio, necesitan nadar en amplios estanques dado que este órgano tan particular está diseñado para el medio marino y su potencial, al verse reducido por las dimensiones pequeñas de los medios artificiales, les causa gran estrés. Sin embargo, muchas belugas pueden vivir muy bien en los oceanarios y esto es aún más positivo si las ballenas al ser rescatadas se encontraban seriamente lastimadas y su reinserción al medio natural se hacía poco viable. Las belugas no son animales solitarios, suelen agruparse en poblaciones para desarrollar su vida y no abandonan a su grupo. Su destreza particular radica en que pueden crear un maravilloso lenguaje propio que emplean para buscar pareja, alimentarse, migrar y alertar frente a los peligros del mar. Un animal único , asombroso e inteligente cuyo cerebro aún encierra muchos misterios para los biólogos marinos .