En la actualidad, desde la sobrepesca y la contaminación acústica hasta los fluctuantes patrones del fluir de las mareas, se incluyen dentro del abanico de causas que pueden ocasionar los varamientos de ballenas . Hoy Greenpeace te explica de qué manera podría contribuir el hombre para frenar este flagelo. 

El fenómeno conocido como varamiento, tiene ocurrencia cuando los vientos y las corrientes marinas arrastran a las ballenas, heridas ,sanas o muertas, hacia las costas y playas. En ocasiones, pueden tener lugar varamientos en masa, y en otras, en una zona puntual, pueden ocurrir un número inusual de episodios de varamiento durante un lapso de tiempo.

“Es muy factible que cada episodio de varamiento tenga sus causas puntuales y específicas”, dice el Dr. Kevin Robinson, director del Dpto de Investigación y Rescate de Cetáceos, una ONG abocada a la conservación marina en Escocia. A continuación, el experto detalla las principales causas conocidas por la comunidad científica para explicar las causas de los varamientos. 

El planeta y su particular topografía 

En algunas partes de nuestro planeta la topografía de las costas y las amplitudes de la marea, pueden coincidir en un punto preciso que se transforma en una trampa de diseño natural para la fauna marina de gran tamaño. Por ejemplo, en algunas áreas costeras que carecen de la profundidad necesaria para que las ballenas puedan orientarse, ocurre que la capacidad de ecolocalización de los cetáceos mengúa, dado que biológicamente solo está preparada para funcionar del modo adecuado en aguas profundas.

Además de este inconveniente que resulta de gravedad para las ballenas , durante un ciclo de marea, el agua puede retroceder de forma repentina varios kilómetros en pocos minutos, lo que para la fauna marina puede implicar la posibilidad certera de quedar varada en estas zonas de aguas poco profundas. 

Causas naturales del varamiento de ballenas

Para el Dr Dan Jarvis, miembro de British Divers Marine Life Rescue, un cetáceo puede quedar varado por estar herido, enfermo, senil, perdido, o por no poder alimentarse del modo correcto o por tener alguna otra dificultad —por ejemplo, que haya atravesado recientemente un parto difícil—, o simplemente por ser un ejemplar de edad avanzada. Las ballenas cuya salud se encuentra deteriorada pueden, debido a su debilitamiento, ser arrastradas hasta la orilla, y las que nadan desorientadas al adentrarse accidentalmente en aguas poco profundas, pueden quedar atrapadas luego del repentino retiro de la marea. 

Otro factor para el Dr Jarvis , que puede causar que la fauna marina (tanto depredadores como sus presas) se aproximen a las costas y queden varados , es la depredación. El Dr Jarvis resalta que muchos delfines, por ejemplo, se aproximan peligrosamente hasta las áreas costeras huyendo de las orcas. También, un grupo de ballenas podría quedar varado mientras se encuentra realizando sus actividades de caza en aguas de poca profundidad. Al dirigirse hacia las orillas, que es parte de una técnica de caza muy común y frecuente entre las orcas , muchas veces puede ocurrir que al aproximarse demasiado , queden varadas en la costa o playas y deban esperar que aparezca una gran ola y las devuelva al mar.

Las actividades humanas como factor de varamiento

Las actividades que realizan los hombres, tanto las industriales como la mala gestión de los residuos plásticos son en la actualidad, un factor que perjudica gravemente a la vida marina.La pesca industrial, las frecuentes colisiones con barcos, y la contaminación , provocan enfermedades y heridas a la fauna marina que la llevan a encallar. La sobrepesca es otro factor muy perjudicial que deja a las ballenas sin sus fuentes de alimento, y los obliga a dirigirse peligrosamente hacia las costas para cazar.

La contaminación acústica del medio marino

La contaminación acústica es, al presente , un grave problema para la fauna marina. Por ello, para las especies que utilizan las ondas sonoras para comunicarse el impacto es letal. Los ruidos que provocan los estudios sísmicos, interfieren con la comunicación de las ballenas, y por ello,al quedar desorientadas y asustadas deriva en que se queden en las orillas. Algunas especies como los zifios,que son de aguas profundas en mar abierto, son especialmente sensibles a los ruidos del sonar petrolero , incluso estando a varios kilómetros de distancia. El Dr Robinson señala al respecto que las ballenas “quizás posean el oído más fino, delicado y sensible del planeta”.