Basándose en la información obtenida por investigadores, las primeras ballenas que se conocen son los arqueocetos, un grupo de cetáceos primitivos que vivieron entre el Eoceno y el Oligoceno, hace unos 50 a 25 millones de años.
Estos animales tenían un aspecto muy diferente al de las ballenas modernas, ya que conservaban rasgos de sus ancestros terrestres, como las patas traseras, los dientes diferenciados y los ojos laterales.
Los arqueocetos se dividieron en varios grupos, cada uno con sus propias características y adaptaciones:
- Los pakicétidos fueron los primeros arqueocetos, que vivieron hace unos 50 millones de años. Eran animales pequeños, de unos 2 metros de longitud, que tenían un cráneo alargado y un hocico estrecho. Sus oídos estaban especializados para captar sonidos bajo el agua, pero también podían oír en el aire. Sus patas traseras eran funcionales y les permitían caminar y nadar. Se alimentaban de peces y otros animales acuáticos.
- Los ambulocétidos fueron los segundos arqueocetos, que vivieron hace unos 48 millones de años. Eran animales más grandes, de unos 4 metros de longitud, que tenían un cuerpo robusto y una cola larga. Sus patas traseras eran más cortas y anchas que las de los pakicétidos, y sus pies tenían membranas interdigitales. Sus ojos estaban situados más arriba en el cráneo, lo que les daba una mejor visión en el agua. Se alimentaban de peces y otros animales acuáticos, pero también podían cazar en la tierra.
- Los remingtonocétidos fueron los terceros arqueocetos, que vivieron hace unos 45 millones de años. Eran animales alargados, de unos 5 metros de longitud, que tenían un cuello largo y flexible y una cabeza pequeña. Sus ojos eran pequeños y estaban situados en los laterales del cráneo. Sus patas traseras eran reducidas y no les servían para caminar. Sus dientes eran puntiagudos y les servían para atrapar presas rápidas. Se alimentaban de peces y otros animales acuáticos.
- Los protocétidos fueron los cuartos arqueocetos, que vivieron hace unos 40 millones de años. Eran animales diversos, que podían medir desde 2 hasta 10 metros de longitud. Tenían un cuerpo fusiforme y una cola musculosa. Sus patas traseras eran vestigiales y solo les servían para la reproducción. Sus ojos eran grandes y estaban situados cerca del hocico. Sus dientes eran variados y les servían para alimentarse de diferentes tipos de presas. Se alimentaban de peces, crustáceos, moluscos y otros animales acuáticos.
- Los basilosáuridos fueron los últimos arqueocetos, que vivieron hace unos 35 millones de años. Eran los más parecidos a las ballenas modernas, ya que tenían un cuerpo hidrodinámico y una cola con una aleta horizontal. Sus patas traseras eran muy pequeñas y no tenían función alguna. Sus ojos eran medianos y estaban situados cerca del hocico. Sus dientes eran cónicos y les servían para desgarrar la carne. Se alimentaban de peces, calamares, tiburones y otros cetáceos.
Las ballenas actuales
Las ballenas actuales se dividen en dos subórdenes: los misticetos o ballenas barbadas y los odontocetos o ballenas dentadas.
Estos grupos se originaron a partir de los basilosáuridos hace unos 30 millones de años, y han desarrollado diversas adaptaciones para sobrevivir en el medio marino:
Los misticetos son las ballenas más grandes que existen, ya que pueden medir desde 6 hasta 30 metros de longitud. Tienen un cuerpo robusto y una cabeza enorme. No tienen dientes, sino unas láminas de queratina llamadas barbas, que les sirven para filtrar el agua y retener el plancton, el krill y los peces pequeños de los que se alimentan.
Tienen dos orificios nasales o espiráculos en la parte superior de la cabeza, por los que expulsan el aire y el vapor de agua. Algunos ejemplos de misticetos son la ballena azul, la ballena jorobada, la ballena gris y la ballena franca.
Los odontocetos son las ballenas más diversas que existen, ya que incluyen desde los delfines hasta las orcas. Tienen un cuerpo delgado y una cola con una aleta vertical. Tienen dientes, que pueden ser desde unos pocos hasta cientos, dependiendo de la especie. Tienen un solo orificio nasal o espiráculo en la parte superior de la cabeza, por el que expulsan el aire y el vapor de agua.
Tienen un órgano llamado melón, que les sirve para producir y recibir sonidos bajo el agua, lo que les permite comunicarse y localizar a sus presas mediante la ecolocalización. Se alimentan de peces, calamares, crustáceos, moluscos y otros cetáceos. Algunos ejemplos de odontocetos son el delfín común, el delfín nariz de botella, el cachalote, el narval y la orca.
En conclusión, las principales diferencias entre las primeras ballenas que aparecieron y las actuales son:
- Las primeras ballenas tenían patas traseras, mientras que las actuales no.
- Las primeras ballenas tenían ojos laterales, mientras que las actuales los tienen cerca del hocico.
- Las primeras ballenas tenían dientes diferenciados, mientras que las actuales tienen dientes cónicos o barbas.
- Las primeras ballenas tenían un solo espiráculo, mientras que las actuales tienen uno o dos.
- Las primeras ballenas no tenían melón, mientras que las actuales sí.
Martín Prieto comenzó su carrera en Greenpeace Argentina como Director Ejecutivo. Logró importantes avances como la sanción de la Ley de Promoción de la Energía Eólica y la Ley de Protección del Bosque Nativo. En 2012, asumió como Director Ejecutivo de Greenpeace Andino, liderando las oficinas de Argentina, Chile y Colombia hasta 2018.
En 2006, Prieto fue designado Líder de la Campaña de Ballenas por Greenpeace International, destacándose en el bloqueo de los intentos de Japón de retomar la caza comercial de ballenas junto a la Comisión Ballenera Internacional. Además, ha sido asesor de Greenpeace International, Greenpeace Mediterráneo, Greenpeace India y Greenpeace Rusia.