En un reciente estudio que data de noviembre de 2024, el Programa liderado por el equipo de biólogos de Nature Communications , ha podido constatar un dato más que increíble . Los cachalotes, según afirman los científicos,han desarrollado un lenguaje con un nivel  de sofisticación tan complejo y evolucionado como el  humano. 

Que los cachalotes son un grupo de cetáceos que posee elevadísimas capacidades cognitivas –esto es, que son criaturas marinas “súper listas”– es algo que la Ciencia conoce  desde hace largo tiempo. Por ejemplo, subrayan los bióloga marinos, esto encuentra su explicación más evidente al analizar la conformación de su corteza cerebral y constatar, a simple vista, que presenta un altísimo número de circunvoluciones. Esta característica, es un claro indicio en su morfología que da cuenta  de que se trata de una especie dotada de una extraordinaria inteligencia.

De modo específico, el número de circunvoluciones presentes en el cerebro de un mamífero marino adulto de esta especie, conocida como cachalote,  es abrumadora.  Los investigadores y científicos de otras disciplinas,  han podido constatar  que la cantidad de circunvoluciones cerebrales en los cachalotes supera–y  con creces- , a las que posee el  cerebro humano de un adulto. 

Los cachalotes criados en cautiverio, por ejemplo, han demostrado que  pueden  reconocerse a sí mismos ante los espejos.  O, incluso, algunos experimentos y pruebas específicas, arrojaron que tienen habilidades asombrosas en el campo matemático, demostrando que a la hora del nado, donde tienen que recorrer largas distancias   pueden  desarrollar habilidades de tipo lógico aritméticas. Esta habilidad les permite calcular con precisión tiempos de nado y descanso, a modo de hacerlos óptimos . Pero esto no es todo: las últimas investigaciones han revelado datos de esta especie aún más asombrosos.

El desarrollo del lenguaje en los cachalotes    

Una de las formas primordiales en que se hace evidente  algo tan complejo  como la inteligencia, es en la capacidad que han desarrollado los miembros de una misma especie para comunicarse entre sí. Un logro notable, que en una especie como es en el caso de los cachalotes se traduce en la práctica,  en el aumento exponencial de las  probabilidades de supervivencia de los  individuos que la integran,  así como también, del éxito de  su ciclo  reproductivo.

A través de los sacos aéreos que los cachalotes poseen en su cerebro, explican los biólogos marinos, es que estos mamíferos  pueden emitir unos  sonidos  de altísima frecuencia llamados “clics” que logran direccionar en la dirección que desean, tan solo con simples movimientos  de su cabeza.

El eco u ondas que se disparan y viajan en el medio marino,- estos “clics”- son frenados al rebotar contra alguna presa cercana u objeto . Así,  esta información- tan valiosa como vital- regresa al mamífero y es detectada y procesada a una velocidad asombrosa , por unos receptores clave alojados en sus mandíbulas. De allí, la onda codificada va al cerebro y se completa el proceso. Es decir, los cachalotes  pueden “oír” a la perfección todo lo que acontece en el mar , gracias a este sistema natural,  tanto el relieve presente y circundante del medio marino como el movimiento de  sus presas, es fácilmente detectado por el animal.

Pero además,  este grupo de cetáceos, los cachalotes,  pueden emitir una segunda clase de sonidos. Éstos son  bien diferentes a los primeros y poseen la particularidad de ser de muy baja frecuencia .Este tipo de ondas sonoras se utilizan a la hora de la comunicación entre pares y son muy  similares a las estructura básica que presenta  el lenguaje humano. 

Un sistema muy similar al lenguaje humano

Estos segundos “clics” o sonidos que realizan los cachalotes, serían los más similares al lenguaje humano, según precisan los investigadores de Nature Communications.  Algo así como una segunda secuencia que contiene a un  grupo más complejo y  amplio de significados útiles para la especie . Lo más fascinante es que estas secuencias sonoras – denominadas  codas- tendrían la particularidad de   modularse teniendo en cuenta los contextos y las necesidades puntuales que van surgiendo en el devenir del medio marino, o más fácil, en la diaria de la vida marina de los cachalotes.  Es decir, que este lenguaje es viable y adaptable a las necesidades puntuales del contexto y de las circunstancias que presenta el medio marino, mostrando con éxito que los cachalotes tienen, como los humanos, la facultad de poder adaptar su  lenguaje  y moldearlo en función a contexto.