Greenpeace te invita a sumergirte en el mundo de las ballenas azules de la Antártida. Allí, donde este animal , el más grande del mundo, ha formado una unidad estrecha conformando una sola gran población circumpolar.
Estudiar a las ballenas que habitan las gélidas aguas de la Antártida puede ser algo casi imposible. De hecho, la investigación más actual se remonta al año 2004 y eso es toda la notación que se tiene de sus poblaciones en la región . Sin embargo, estos datos han sido de invaluable ayuda para los investigadores y biólogos marinos que hoy continúan intentando develar los misterios de la vida de la especie.
Basándose en los datos acopiados en 2004, en relación a las ballenas azules antárticas y utilizando viejos archivos y registros de los años en que se llevaba adelante la caza de ballenas en el mundo – y que son asombrosamente minuciosos- , el equipo científico de la Universidad de Washington, dirigido por la Dra Zoe Rand, publicó en la revista especializada Endangered Species Research, sus más recientes hallazgos.
Durante los años en que tenía lugar la caza de ballenas , en el marco de un programa científico llamado el Discovery Marking Program, los científicos clavaban unas varillas metálicas de unos 30 centímetros de longitud con sus respectivos números de serie en la zona de los músculos de las ballenas. Luego, debían esperar a que las ballenas fueran cazadas y la varilla que se le extraía era devuelta con los datos más relevantes del ejemplar: longitud, sexo, tamaño y el lugar de captura del animal.
Datos claves de la población de ballenas azules en archivo
Una vez que la información de la ballena capturada , gracias al uso de la varilla, llegaba de regreso al laboratorio de Discovery Marking Project,el equipo de científicos , pasaba al análisis de datos que se basaba en comparar donde fueron marcadas las ballenas con las varillas y en dónde fueron capturadas. Estos datos que podrían haber arrojado información clave para el conocimiento de los patrones de migración y la estructura de la población de las ballenas azules australes nunca fueron estudiados hasta el día de hoy, informaron desde la Universidad de Washington.
Para este nuevo estudio clave para el conocimiento de patrones de comportamiento de las ballenas azules, estos datos históricos de los registros de la caza de ballenas se estudiaron junto con datos de encuestas más actuales. En esta vinculación estratégica se pudo calcular las tasas de movimiento interanual entre las zonas que forman las tres cuencas oceánicas del Océano Austral (Índico , Atlántico y Pacífico), que son las áreas de alimentación preferenciales de la especie.
En los análisis, los investigadores encontraron evidencia de una mezcla frecuente de ejemplares entre las cuencas oceánicas, lo que les indicó que -aparentemente- las ballenas azules no regresaban a la misma cuenca luego de realizar su migración cada año. Esto les sugirió con claridad la idea de que las ballenas azules antárticas conforman una única población o familia circumpolar en el Océano Austral.
Resultados consistentes
Estos resultados, para el equipo de expertos, son consistentes con los estudios en relación a los cantos o melodías que pueden articular las ballenas azules antárticas, que se escuchan frecuentemente en todo el Océano Austral. Los científicos solo han registrado un tipo de melodía o canto entre las ballenas azules de la Antártida.Si se compara este dato, los expertos afirman que es consistente con los cinco tipos de cantos que tienen las ballenas azules pigmeas que se corresponden a cinco poblaciones distintas. Estos resultados también se apoyan en la evidencia aportada por los estudios genéticos, que arrojaron que las ballenas azules de la Antártida se encuentran más estrechamente relacionadas de lo que se esperaría si formaran parte de poblaciones separadas.
Sin embargo, a pesar de haber avanzado un largo trecho en el conocimiento de las ballenas azules antárticas, casi nada se ha podido conocer acerca de su comportamiento reproductivo, afirman con pesar los investigadores. El análisis detallado de los datos históricos de la caza de ballenas en cruce con los datos de estudios más contemporáneos, como el hoy común etiquetado satelital y la fotoidentificación, siguen siendo el mejor recurso de los científicos para descubrir los secretos de la fascinante ballena azul, el animal más grande del planeta.
Martín Prieto comenzó su carrera en Greenpeace Argentina como Director Ejecutivo. Logró importantes avances como la sanción de la Ley de Promoción de la Energía Eólica y la Ley de Protección del Bosque Nativo. En 2012, asumió como Director Ejecutivo de Greenpeace Andino, liderando las oficinas de Argentina, Chile y Colombia hasta 2018.
En 2006, Prieto fue designado Líder de la Campaña de Ballenas por Greenpeace International, destacándose en el bloqueo de los intentos de Japón de retomar la caza comercial de ballenas junto a la Comisión Ballenera Internacional. Además, ha sido asesor de Greenpeace International, Greenpeace Mediterráneo, Greenpeace India y Greenpeace Rusia.